Con la rotulación integral del vehículo comercial, se consigue una campaña publicitaria que seguro que llama la atención de los transeúntes. El vehículo se convertirá en una autentica valla publicitaria móvil.
Esta rotulación además de proteger el vehículo de los cepillos de los túneles de lavado, protege la pintura de ralladuras, piedras, productos químicos y del efecto decolorante del sol.
Si se desea vender el vehículo, solo se tiene que quitar la rotulación, dejando al descubierto la pintura original, entonces recuperará su aspecto original.